Los dinosaurios tenían sólo un tipo de clasificación, y la clave estaba en la cadera. Se clasificaban en Saurisquios (con "cadera de lagarto") y Ornitisquios (con "cadera de ave"). En ambos las caderas se componían de cuatro partes: acetábulo, ilion, pubis e isquion. En los saurisquios, el isquion apunta hacia atrás y el pubis hacia adelante, mientras que en los Ornitisquios el isquion y el pubis se hallan alineados. Gracias al anatomista inglés Harry Seeley supimos en 1887 esta diferencia que marcó dos grandes grupos de estos "lagartos terribles". En la primera imagen véis una pelvis saurisquia y en la segunda una pelvis ornitisquia.
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